La historia real de Winnie The Pooh


En el post de hoy os venimos a contar la historia real tras el oso Winnie The Pooh. ¡Comencemos!

La historia real de Winnie the Pooh comienza con una pequeña osa negra de Canadá y un soldado llamado Harry Colebourn. Todo comenzó en 1914, al inicio de la Primera Guerra Mundial, cuando Colebourn, un veterinario y teniente del Cuerpo Veterinario del Ejército Canadiense, viajaba en tren desde Winnipeg, Manitoba, hasta Valcartier, Quebec, para recibir entrenamiento militar antes de ser enviado a Inglaterra.

Durante una parada en White River, Ontario, se encontró con un cazador que había capturado a una osezna negra tras haber matado a su madre. El cazador estaba dispuesto a vender la cría por 20 dólares (alrededor de 500 dólares actuales ajustados a la inflación).

Colebourn, quien tenía un gran amor por los animales, decidió comprar la osa y llevarla con él como mascota de su unidad. La llamó "Winnie" en honor a su ciudad natal, Winnipeg. Rápidamente, Winnie se convirtió en una compañera querida entre los soldados. Era dócil, amigable e inteligente, lo que facilitó su entrenamiento. Aprendió a ponerse de pie sobre sus patas traseras cuando se lo pedían, a seguir a Colebourn como si fuera un perro y a jugar con los soldados sin causar problemas.

En octubre de 1914, cuando Colebourn y su unidad fueron desplegados en Inglaterra, llevó a Winnie con él a Salisbury Plain, donde estaban estacionadas las fuerzas canadienses. Allí, la osa continuó siendo una mascota popular, levantando el ánimo de las tropas durante su entrenamiento. Sin embargo, cuando en diciembre de 1914 Colebourn recibió órdenes de ir al frente en Francia, comprendió que la zona de guerra no era un lugar adecuado para un oso, por más bien portado que fuera. Tomó la difícil decisión de dejar a Winnie al cuidado del Zoológico de Londres, con la intención de recuperarla después de la guerra.

Pero eso nunca sucedió. Winnie prosperó en el Zoológico de Londres y rápidamente se convirtió en una de sus atracciones más famosas. Su naturaleza amigable permitió que los niños interactuaran con ella con seguridad, e incluso se les permitía alimentarla con la mano, algo extremadamente inusual para un oso. Entre quienes desarrollaron un fuerte vínculo con Winnie estaba un niño llamado Christopher Robin Milne, quien visitaba el zoológico con frecuencia junto a su padre, A.A. Milne.

Christopher Robin quedó tan encantado con Winnie que cambió el nombre de su osito de peluche de "Edward Bear" a "Winnie the Pooh". La parte de "Pooh" supuestamente proviene de un cisne al que alguna vez había llamado así. Viendo el amor de su hijo por Winnie y cómo la osa despertaba su imaginación, A.A. Milne comenzó a escribir historias sobre Christopher Robin y su oso, junto con otros animales de peluche que el niño tenía. Estas historias se convirtieron en Winnie-the-Pooh (1926) y The House at Pooh Corner (1928), dando vida a los personajes de Piglet, Ígor, Tigger y el resto del Bosque de los Cien Acres.

Mientras tanto, la verdadera Winnie vivió una vida larga y feliz en el Zoológico de Londres. Permaneció allí hasta su muerte el 12 de mayo de 1934, a los 20 años, una edad notablemente avanzada para un oso negro en cautiverio. Colebourn, quien sobrevivió a la guerra y regresó a Canadá para continuar su trabajo como veterinario, visitó a Winnie varias veces a lo largo de los años.

Hoy en día, una estatua de Winnie y Colebourn se encuentra en el Parque Assiniboine en Winnipeg, y otra estatua de Winnie está en el Zoológico de Londres, conmemorando a la pequeña osa que, de manera indirecta, inspiró a uno de los personajes de ficción más queridos de la historia.
¿Conocíais la historia? ¡Os leemos en los comentarios!

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