Delicada, elegante y llena de sabor, esta tartaleta de espárragos blancos y verdes es una forma deliciosa de celebrar lo mejor de la temporada.
Con una base crujiente y dorada, y un relleno cremoso que realza el sabor sutil de los espárragos, es perfecta como entrante en una comida especial, para un brunch con amigos o incluso como plato principal acompañado de una ensalada fresca.
Visualmente atractiva y muy fácil de preparar, esta tartaleta conquista tanto por su presentación como por su sabor.
Ingredientes (para 4 personas):
- 1 lámina de hojaldre
- 2 huevos
- 1 puerro
- 1 diente de ajo
- 1 manojo de espárragos trigueros
- 6 espárragos blancos
- 100 ml de nata
- Aceite de oliva
- Queso rallado para gratinar
- Sal
- Pimienta negra.
Instrucciones:
- Precalentar el horno a 180º C
- Lavar los espárragos trigueros, quitarles la parte dura del tallo y hervirlos en agua salada durante 5 minutos
- Picar el puerro y el ajo y sofreír unos minutos; reservar
- Forrar el molde con la masa de hojaldre adaptándola bien y retirar el hojaldre sobrante
- Pinchar el hojaldre con un tenedor
- Poner encima del hojaldre papel de horno y unos garbanzos. Hornear 5 minutos. Quitar el papel de horno y los garbanzos.
- Repartir el puerro por encima.
- Batir los huevos con la nata y salpimentar. Echarlo por encima.
- Colocar los espárragos, espolvorear con queso y hornear de nuevo.
- No debe quedar muy seco, pero hay que controlar que el huevo esté cuajado.
¡Animaros a probar esta receta estas Navidades!
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